UN PLAN REDONDO

Makelele está harto: se quiere ir...

Se habla mucho del Real Madrid y sus fichajes, pero muy poco de Cambiasso y su curiosa decisión de no irse cedido al fútbol alemán y resistir en la plantilla pese a las amenazas de ser cajoneado. Claro, el Cuchu no es galáctico, pero es llamativo que tampoco se hable mucho de esto en Argentina.

Creo que la jugada de Cambiasso es audaz pero muy inteligente. No tiene nada que ver, como muchos podrían creer, con la idea de hacer la plancha en el banquillo (o incluso fuera de él), cobrar el sueldo y disfrutar de Madrid (algo que podría decirse, por ejemplo, de McManaman). Creo que Cambiasso está aplicando un plan de coyuntura para volver al primer equipo.

Es un plan con el sello de su ídolo, Redondo: evaluar las circunstancias, plantarse en sus trece y no seguir la corriente, confiando en que pronto el curso de los acontecimientos le será favorable. ¿Qué acontecimientos? Primero, la llegada de Beckham rompe definitivamente la posibilidad del doble pivot en el mediocampo que ya es regla en Europa y que el Real venía practicando cuando Cambiasso volvió a Madrid desde el fútbol argentino. Forzado a poner todas sus estrellas en la cancha, Queiroz tiene que confiar -por lo menos durante las próximas semanas, mientras se prueba el nuevo modelo con todas las estrellas en la cancha- en un 5 único, al estilo tradicional, para cortar y distribuir. El único indiscutible en esa posición es Makelele, que acaba de declarar que prefiere irse o recibir más dinero. Y la salida de Flavio deja al Madrid sin muchas alternativas. Incluso si la situación de Makelele se arreglara, el Madrid solo tiene para él dos reemplazantes naturales. Guti y Cambiasso. Y aunque Guti empezó en esa posición y luego evolucionó como delantero, mi opinión es que Guti rinde más arriba y que Cambiasso es un 5 superior y tendrá oportunidad para demostrarlo.

Si Makelele no se va, ni siquiera hace falta que se lesione o lo suspendan; el equipo tiene una agenda lo suficientemente intensa como para necesitar de dos figuras en una posición tan clave. La posibilidad de desplazar a alguno de los defensores centrales para cubrir un eventual hueco dejado por Makelele (Helguera también puede jugar de 5) se hace difícil tras la salida de Hierro y la decisión de no incorporar a Milito. El Madrid ni siquiera tiene jugadores de primera línea en el centro de la defensa, mal puede avanzarlos en el terreno.

Hay una alternativa más: si luego de unos partidos con todos los galácticos en la cancha, los resultados no llegan, el entusiasmo cede y el técnico decide que hay que volver preventivamente al doble pivot, entonces Cambiasso tiene definitivamente un lugar asegurado. Esto puede ocurrir también si uno de los galácticos sale por lesión o suspensión.

Mi pronóstico es que pese a todas las amenazas que ha recibido (por cierto, una práctica brutal bastante común en el Madrid y con muy poco del supuesto señorío que el club tiene), Cambiasso, hoy proscripto, estará jugando en varios partidos esta temporada, incluso desde el primer minuto.

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